El hijo del rigor

Después de haber abierto «Classified» 9a+ y realizar el tercer ascenso de «Corona» (considerada de grado similar), ambas las rutas más duras de Frankenjura, el joven mutante Alex Megos no para de sorprender al mundo con una nueva ascensión, «Pantera», 9a, ruta fue abierta por Markus Bock en 2009 y que encadenó ¡al segundo pegue! Recoros que hace tan solo un par de meses este escalador hizo noticia -y de pasada se hizo famoso- por encadenar «La Rambla» (9a+) al segundo intento, días después de lograr el primer 9a a vista de la historia con «Estado Crítico».

Hasta antes de estos famosos encadenes, Megos no se había hecho notar a nivel global. Prácticamente este «personaje» surgió de un día para otro, haciendo realidad un sueño que a cualquier escalador se le ha pasado por la cabeza, sin duda. Pero Megos escala desde los cinco años y hoy es un verdadero atleta, quien a sus 19 años lleva un riguroso entrenamiento. Desde pequeño se interesó por los deportes outdoors, favorecido por una impresionante resistencia y cardio, practicando mountain bike y trail running. A los 13 años participó en su primera Copa del Mundo en Escalada, The Bavarian Cup, comenzando así a entrenar de manera profesional. Al año siguiente, se proclamó campeón de este torneo. Así sus logros se i9ncrementaron como bola de nieve: en 2008 y 2009 ya era el campeón juvenil de Alemania. En 2009 y 2010 ganó la copa europea juvenil. Y en 2010 la copa juvenil de mundo en Edinburgh.

Foto // Jorgo Megos

Con Frankenjura al lado, spot de clase mundial, con una roca exquisita, la motivación de Megos lo llevó a encadenar poco a poco las rutas más extremas, realizando gradualmente las repeticiones de duras a más duras, hasta que comenzó a enfocarse en los tiempos. Es decir; ahora no sólo se preocupaba de encadenar las rutas para subir su grado, sino de escalarlas en el menor tiempo posible. Y esta táctica se debía repetir en numerosas rutas y por etapa. Una vez conquistado un grado, este debía lograr todas las vías de la misma cotación y progresivamente en la menor cantidad de intentos posibles.

El entrenamiento indoor, así como para cualquier escalador deportivo, ha sido la clave. Pero Megos en este sentido es digno alemán, rutinas extremadamente definidas, objetivos claros y en función al constante progreso. No ha dejado de trabajar ni un sólo músculo en su cuerpo y al mismo tiempo, entendiendo el uso (trasladado a movimiento) que se le puede dar.

Sin duda, hijo del rigor.

En esta nota anterior publicamos el video de su entrenamiento.