Spirulina: un suplemento recomendable para deportistas ¿por qué hace tan bien?
Las microalgas azul-verdes llamadas «Spirulina», son microorganismos de una antigüedad calculada entre los 3.100 y 3.600 millones de años, casi coincidente con las primeras manifestaciones de vida en el planeta y, por consiguiente, se encuentran en base de casi todas las cadenas alimentarias que se desarrollaron con las eras a partir de ella. Aunque si bien el hombre es de aparición reciente, a través de su funcionamiento metabólico sabe reconocerlo como un alimento primigenio. La Spirulina constituye un alimento concentrado natural. Es la fuente más rica en vitamina B12 conocida en la naturaleza (más de tres veces el contenido de la carne bovina); así como también contiene casi todas las vitaminas restantes del mismo grupo (B1, B2, B3, B6) en muy importantes cantidades. Completan su composición, considerables dosis de vitaminas E, inositol, ácido fólico, biotina y ácido pantoténico.
La Spirulina tiene tres pigmentos diferentes: la Ficocianina, de color azul intenso; la Clorofila, de color verde, y los Carotenoides, de color predominantemente naranja-rojo. Son conocidas desde hace tiempo las virtudes antisépticas y desintoxicantes de la Clorofila, así como por su capacidad de obrar sinérgicamente en la captación y asimilación del Hierro. La biodisponibilidad de Hierro en la Spirulina es un 60% mayor que cualquier otra forma conocida de suministro de ese metal al organismo. El Hierro es esencial para el mantenimiento de los glóbulos rojos de la sangre y del sistema inmunitario. De esta forma, la Spirulina coopera eficazmente para detener y revertir la anemia y otras perturbaciones en la asimilación del Hierro. Las microalgas Spirulina complementan extraordinariamente los regímenes dietéticos, desactivando el estímulo del apetito ansioso al incrementar la producción de neurotransmisores -debido a su gran contenido de L-Fenilalanina y otros aminoácidos- que obran reduciendo el impulso de comer en exceso sobre los centros de la corteza cerebral. Aporta simultáneamente aminoácidos esenciales y no esenciales en un perfil completo, vitaminas y minerales, los cuales son frecuentemente comprometidos cuando seguimos alguna dieta hipocalórica, por ejemplo, para bajar de peso (Becker E.W., Jakover B. Luft, et al – Clinical and biochemical evaluations of the alga Spirulina with regard to its application in the treatment of obesity – Nutr. Rep. Int. 33:365-574. 1986).
Alga spirulina
Su composición química excepcional -alimento concentrado natural- lo hace apto para complementar los tratamientos de otros desórdenes de la nutrición, tales como la bulimia y la anorexia, o sobre personas que han estado sometidas a exposición radiactiva, tal como sucede con el tratamiento de los niños de Chernobyl (Byelorussian Committee of Children of Chernobyl. Report by T. Belookaya, Chair- man. 1992 – En un estudio involucrando 49 niños víctimas de la explosión nuclear de Chernobyl, de 3-7 años de edad, la administración de Spirulina por 45 días, resultó en un incremento en las células T (T-cells) supresoras y de hormonas benéficas. Paralelamente la radioactividad de la orina decreció en un 83 %). Su muy elevado contenido en vitaminas del complejo B (B1, B2, B3, B5 y B12), el máximo conocido en la naturaleza, potencia la actividad cerebral, disminuyendo la pérdida de memoria, la caída en la capacidad de atención y la apatía general. Por su elevado contenido de proteínas, vitaminas y minerales, estimula la reproducción de lactobacilos benéficos (N. Tsuchihashi, T. Watanabe, Y. Takai. Bull. Chiba Hygiene College, Chiba, Japan. 1987), los cuales regulan la digestión y absorción de los nutrientes, protegen nuestro organismo de infecciones y fortalecen el funcionamiento del sistema inmunitario. La combinación del Betacaroteno (más de 30 a 50 veces el contenido de la zanahoria), la enzima superóxido dismutasa (S.O.D.), el Selenio, el Germanio, y la Vitamina E, presentes en importantes proporciones en la Spirulina, actúan como potentes antioxidantes de carácter endógeno y exógeno, retardando el envejecimiento de células y tejidos al neutralizar los “radicales libres”. Este efecto antioxidativo se extiende a la protección de los ácidos grasos insaturados y poliinsaturados, preservándolos de la degradación y consecuente formación de las peligrosas placas u obstrucciones arteriales. En el mismo sentido, ejerce una acción preventiva del cáncer derivado del consumo de tabaco, alcohol, la polución ambiental y el estrés físico y mental. Es por esto que, la spirulina como alimento y suplemento nutricional es ideal para ser utilizada en deportistas y en personas físicamente activas, ya que optimiza la recuperación muscular por su alta concentración aminoacidica y protege nuestras células de radicales libres, producidos por el exceso de ejercicio, debido a su alto contenido de antioxidantes antes mencionado.
La evidencia muestra que la suplementación con spirulina mejora el rendimiento deportivo y conduce a una mayor tasa de oxidación de grasa. Si bien aún no están completamente claros los mecanismos por los cuales esto ocurre, se cree que al aumentar la oxidación de grasas durante el ejercicio, las reservas de glucógeno se mantienen por más tiempo y por lo tanto retrasa la fatiga muscular. En cuanto la oxidación de grasa, se plantea que el alto contenido de ácido linolénico presente en la spirulina, es uno de los responsables en la estimulación de la actividad de enzimas que participan directamente en los procesos de oxidación. El ácido Gammalinolénico (GLA), un ácido graso esencial de importante presencia en estas algas, es el precursor de las prostaglandinas (PGE), hormonas encargadas del control de vitales funciones del organismo, tales como: el control de la presión arterial, la síntesis del colesterol y la división celular. La ingesta insuficiente de GLA tiene adversos efectos, siendo causa de patologías cardíacas, artritis, obesidad y deficiencia de Zinc. La Spirulina aporta GLA en dosis excelentes para actuar preventivamente sobre estas patologías y otras como: síndrome premenstrual y alcoholismo.
La digestibilidad de la Spirulina es sorprendente, siendo variable entre el 88 al 92%. Este hecho singular señala que la biodisponibilidad de esta microalga más que duplica la del resto de los alimentos. Por ejemplo: la carne bovina, ovina o porcina, o las proteínas derivadas de la soja, tienen una digestibilidad que no supera el 35%. Esta enorme diferencia es debida a la constitución celular de la Spirulina, cuya membrana está compuesta de mucopolisacáridos -en lugar de celulosa- a diferencia de la mayoría de las células vegetales. Ello determina que la biodisponibilidad de sus principios nutritivos sea casi inmediata, sin demandar al organismo gastos energéticos previos en la ruptura de las membranas celulares, tal como sucede con la mayoría de los alimentos. Considerada como superalimento por la importancia de la concentración y amplitud de sus principios activos, es adoptada en todos los países desarrollados, a favor de la megatendencia planetaria de sustitución de proteínas derivadas de las carnes rojas y la adopción progresiva del concepto de alimentos sanos en la dieta. En este sentido, la F.D.A. (Food and Drugs Administration, U.S.A.), ha aprobado y auspiciado desde 1981 la utilización de la Spirulina como suplemento dietario natural de uso masivo y sin contraindicaciones, aún en muy altas dosis. Paralelamente, la Organización de las Naciones Unidas, recomienda activamente el empleo de microalgas Spirulina contra la malnutrición aguda en situaciones de emergencias humanitarias y de malnutrición índole crónico. Este particular incentivo en la utilización de este formidable microorganismo es un aporte más al reconocimiento mundial de sus características nutricionales sobresalientes en pro de la recuperación de estados nutriciones alterados aun en situaciones de extrema deficiencia. (Res. A/C.2/60/L.14 – IIMSAM – 2005) En otro hecho que resalta sus propiedades, la N.A.S.A. la ha incorporado como parte de la ingesta de los astronautas, habiendo sido propuesto su cultivo en las futuras mega-estaciones espaciales, no solamente como alimento y sostén de vida, sino como importante generadora oxígeno, dado que estas microalgas son fotosintéticamente mucho más eficientes que las plantas superiores.
Spirulina Aquasolar, orgánica
Datos de Chileclimbers:
– Para los deportistas, se recomienda tomar entre 6 a 12 tabletas, esto es entre 3.000 y 6.000 mg.
– Lo ideal es tomar las tabletas en tres o cuatro dosis, en distintas horas del día. Si no tienes la capacidad de acordarte, entonces tómalas en ayuna.
– ¿Dónde comprar? Se puede encargar por Internet en Functional Nutrition a un precio muy conveniente (ver aquí).
– Sí, gran cantidad de escaladores de alto rendimiento la toman. Ayuda mucho a evitar lesiones musculares y de los tendones.