Detención del pensamiento negativo en la escalada (primera parte)

“¿Cómo pensamos?, ¿qué hay en nuestra cabeza durante el día… ¿qué estructura y da forma a nuestros pensamientos?” Así parto generalmente las clases y sesiones cuando me toca tratar el trabajo con pensamientos (cogniciones, ámbito relacionado en la facultad de procesar información). Puntualmente –y de forma normal- nuestro día transcurre en pensamientos del tipo “palabras, frases, autodiscursos” e imágenes mentales. Por tanto tenemos:

El cómo nos hablamos, cómo nos expresamos, son indicativos de nuestra estructura y forma de pensar; de ver y procesar la vida (y lo que nos pasa). “Las palabras crean realidades”, es un hecho factitivo, y como menciona Humberto Maturana: “Cambiemos nuestras conversaciones y crearemos un mundo distinto”.

El famoso Coaching se adentra bastante en esto, así como la Programación Neurolingüística (PNL), generando un sinfín de herramientas y estrategias para generar cambios en las personas, con mayor o menor resultados.

¿Qué podemos hacer nosotros?

El objetivo final persigue ser más consciente de qué y cómo pensamos.

Es una técnica de autocontrol efectiva para evitar los pensamientos rumiativos, esto es, aquellos pensamientos no deseados que se repiten continuamente en ciertas ocasiones y que llevan a sensaciones desagradables, llegando a afectar a nuestro estado de ánimo y el rendimiento.

Ejercicio 1- Elaborar una lista con los seis pensamientos, frases o palabras NEGATIVAS que comúnmente me “digo”. O más específicamente, cómo me hablo a mi mism@ cuando estoy en un contexto deportivo/estresante/complejo.

Esto es a veces complejo, estas ideas nos vienen de manera automática, inconscientes;  como esa piedra que nos ponen los amigos en la mochila de forma simpática. Lo que diría la Gestalt: ¡el darse cuenta!

Dos características importantes de este tipo de pensamientos es que son improductivos (es decir, no llevan a tomar acciones para resolver lo que preocupa) y no se adaptan a la realidad.

Ejercicio 2– Elaborar una lista de los seis pensamientos, frases o palabras que me digo a mi mism@ para darme ánimos, motivarse, prenderme hacia lo positivo.

Todos tenemos pensamientos, frases, palabras, que nos decimos en esos momentos. Nicolás Massú es un ejemplo tácito, todos recordamos sus gritos de autoánimo del tipo “DALE WEON, BIEN WEON”.

Esto es un ejemplo al vuelo, pero es la idea.

Luego de tener claro cuáles son estos diálogos internos recurrentes, la idea es realizar lo que los especialistas llaman DETENCIÓN DEL PENSAMIENTO, para detectar y frenar estas freses/ideas negativas y sustituirlas por las positivas.

La técnica misma: DETENCIÓN DEL PENSAMIENTO es algo más compleja, pero en esta oportunidad  nos detendremos en este punto. Lo importante para partir es darnos cuenta cuáles son estos pensamientos (palabras, frases) negativos, que nos rumiamos continuamente.

Ya explicaré como continuar, primero lo primero.

Seamos conscientes y veamos la importancia del cómo nos hablamos a nosotros mismos: ¡ES CLAVE!

Ps. Sergio Miranda C.
Entrenamiento Mental
www.entrenamientomental.cl
Cursante Magíster Internacional en Psicología Aplicada a la Actividad Física y al Deporte.
Departamento de Psicología FEACH

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