Los hermanos Pou disfrutando de las cascadas de hielo Noruegas
Los hermanos Pou no paran, pasan desde la Patagonia donde estuvieron en el Fitz Roy al hielo noruego como quien pasa de las Chilcas a las palestras, privilegio que aprovechan y disfrutan al máximo diciendo que ya tendrán tiempo para descansar cuando sean viejitos.. unos cracks!
Aunque los hermanos alaveses nos tienen acostumbrados a viajes por todo el mundo en busca de nuevas aventuras en remotas montañas y paredes, no deja de sorprender la facilidad con la que cambian de registro, como en este caso, donde dejan los pies de gato y la bolsa de magnesio aparcados en casa, para coger los piolets y los crampones, y dirigirse a Noruega, donde en la zona de Rjukan se dedican a escalar espectaculares y efímeras formaciones de hielo, que apenas en un mes y con la subida de las temperaturas, se convertirán en agua.
Eneko disfrutando de los azulados cristales noruegos
Habrá que esperar a la llegada del próximo invierno, para que con sus bajas temperaturas, nos brinde la posibilidad-si es que hace suficiente frío- de volver a repetir escaladas similares, que aparecen y desaparecen como por arte de magia, con el cambio de las estaciones. Huyendo del cálido invierno en el sur de Europa, se dirigen hacia el país escandinavo, donde con unas temperaturas de entre -3º y -10º, han escalado -acompañados de de los experimentados montañeros mallorquines Tomeu Rubí, Carles Mesquida y Toni Ferrando- un montón de cascadas de mucha calidad como “Rjukanfossen” WI4, “Trappfoss” WI4, “Vemorkbrufoss Vest” WI5, “Sabotorfossen”WI5, “Topp”WI5, “De Kaller Meg Fjard” M7-, “Tipp” WI5 , “Zendium”M7, “Fyrstikka” WI5, “Bored to the Extreme” M9, pero destaca sobre todo por ser una de las más bonitas y más difíciles, la increíble “Juvsoila” WI6, una de las joyas más preciadas de esta zona Noruega.
Iker clavando el piolet sobre los hermosos bosques escandinavos
De todo lo que visitan, se quedan con el área de “Krokan” para la escalada de corte más deportivo y “Upper Gorge” para las vías más largas y de corte alpino. Un viaje fantástico a un lugar paradisiaco para la práctica de esta especialidad, que les vendrá muy bien como entrenamiento, para esos proyectos de alpinismo que suelen desarrollar en macizos más grandes como los Alpes, los andes o el Himalaya. Ahora a disfrutar de estas imágenes espectaculares que invitan a gozar de la naturaleza de una manera salvaje. Pero Noruega solo es la segunda aventura dentro de un año que vendrá repleto de viajes y expediciones, y donde probablemente todavía visiten el Atlas Marroquí, los Andes y el Himalaya. Como bien dicen ellos: ”Ya habrá tiempo de descansar cuando seamos mayores».