De que se trata tu zona de confort

Muchas veces hemos escuchado eso de la “zona de confort”. Como estudiante de psicología antes ya había revisado teorías que hablan de zonas, como la de Piaget o también en lo referente al Flow (Csikszentmihalyi). Pero cada una con ideas y conceptos distintos.

Es, en un resumen, una metáfora sencilla, potente, que trabaja con nuestro cerebro de manera gráfica, que nos explica cómo están construidas nuestras estructuras de confianza y aprendizaje; en general se puede adaptar a distintos contextos de nuestra persona y darnos herramientas para avanzar, mejorar y crecer.

El creador de “La zona de confort” habría sido Stephen Covey en su best seller 7 hábitos de la gente altamente efectiva.

Para mi es mi casa, mi lugar en donde tengo todo lo que necesito, estoy protegido; tengo y mantengo un control. No necesito de nada más.

Para Matti Hemmi (el del video ¿te atreves a soñar?) es un fuerte del oeste, rodeado de una pared alta de ladrillos, una zona segura en territorio inhóspito. En esta imagen, al ampliar la zona de confort -o comodidad- el debía decidir en que parte de este muro debía trabajar para correrlo un poco más hacia afuera; calcular la distancia de este avance, tomar la carretilla y mover los ladrillos.  Al hacer esto se dejan espacios abiertos a peligros. ¿Qué peligros ves al ampliar tu zona de confort?

Esta zona de confort es un espacio mental que determina lo que sabes, pero lo que sabes en el sentido de una máxima oriental: SABER Y NO HACER, NO ES SABER. Lo que sabes, pero no has hecho, es en realidad una zona de confort potencial; una zona con un diámetro más grande que esta esperando a hacerse realidad.

¿Quieres salir de tu zona de confort?

No hay nada de malo en querer quedarse en la zona. Es decisión de cada uno. Lo importante es que, de hacerlo, debemos tener un propósito para esto.

Este es el espacio al que accedemos nada más salir de la zona de confort, aquella que esta tras estos muros. Es ese lugar en que nos sentimos conscientemente incompetentes; sabemos -y sentimos- poco cómodos o francamente que no le pegamos mucho al cuento. Estamos aprendiendo. Pero con practica terminara convirtiéndose en territorio conocido. Pero mientras esto sucede, nos sentimos frustrados, fracasados, generando barreras para el avance, rechazo hacia lo que sucede, y unas ganas locas de volver a territorio conocido. La práctica hará que nuestros limites crezcan y tengamos una zona de confort nueva, amplia.

¿Cuáles son las ultimas que has aprendido?

Zona de pánico

Aquella que viene luego de la zona de aprendizaje. Es la tercera zona de este dibujo, y es en la que muchos piensan al momento de intentar o ver algo nuevo: pánico. Un espacio mental en el que no queremos entrar. Todos tenemos nuestra zona de pánico personal, aquello que nos aterra: hablar en público, tener un trabajo de oficina, terminar un proceso y dar el salto a otra etapa, etc. Muchos se saltan la zona de aprendizaje, esta el confort y el pánico. Sin espacios intermedios.

También se le suele llamar la zona de la no experiencia. Los que lo miran desde esta perspectiva no sienten miedo de entrar en ella. Le pasa a la gente que tiene muchas ganas de aprender cosas nuevas y desafiantes.

La zona mágica

Así se la llama a la zona de pánico cuando te vuelves asiduo a la zona de aprendizaje y más allá. Esto vale para un mundo o contexto en concreto, en nuestro caso: el deporte o mas bien la escalada. Al estar en esta zona experimentas sensaciones similares la Flow de Csikzentmihalyi (estado en que lo que ocurre y la persona se funden en uno, se disfruta tanto lo que se está haciendo que se deja de experimentar el tiempo y esfuerzo).

Ahora, en todo este juego tenemos 2 fuerzas que nos impulsan o frenan según sea el caso.

Tensión creativa

Es la fuerza que nos impulsa a alcanzar el objetivo o meta que nos hemos planteado, nos quiere llevar fuera de nuestra zona de confort: nos motiva a avanzar. Es una fuerza que nos lleva a ir más y más allá de lo “normal”, que pocos o nadie logra comprender porque seguimos persiguiendo o trabajando en pos de nuestro objetivo.  Es esa locura que nos invade, que nos motiva frente a lo que venga.

Tensión emocional

Estas son todas emociones, pensamientos, argumentos e ideas a las que nos enfrentamos cuando nos planteamos salir de la zona de confort. Nos frenan y dicen ¿para qué?  Es como un elástico que nos mantiene amarrados a la zona de confort, a la comodidad, que no nos deja avanzar: se mira, pero no se toca (o avanza, o crece).

La tensión creativa que nos tira e impulsa hacia fuera genera automáticamente una tensión emocional en sentido contrario. Mientras avanzamos hacia nuestra meta, la tensión creativa (motivación) va bajando y la tensión emocional va creciendo.

¿Que componen la tensión emocional? Emociones complejas y de difícil manejo como los miedos o tristeza. Sobre todo, el miedo a la pérdida (de distinta índole); o también el querer agradar a los demás.

Ps. Sergio Miranda C.

sergio@entrenamientomental.cl