Kilian Jornet ha vuelto a la cima del Everest en solo 17 horas, marcando un record histórico
El ultramaratoniano y montañero catalán, de 29 años, Kilian Jornet ha vuelto a conquistar la cima del mundo, el Everest, de 8.848 metros, con un estilo minimalista, sin ayuda de sherpas ni oxígeno artificial y sin usar cuerdas fijas, a través de la cara norte. En menos de una semana de haberlo conseguido por primera vez. Jornet salió esta vez desde el campo base avanzado, a unos 6.500 metros, e invirtió 17 horas en subir hasta la cima, un trayecto que hace seis días realizó en algo más de 21 horas. Entonces ya acumulaba más de cuatro horas y media de aventura, puesto que inició su recorrido en el monasterio de Rongbuk, a 5.100 metros.
Jornet salió el 27 de mayo y completó la distancia de una sola vez a pesar del fuerte viento presente en el techo del mundo. No uso oxígeno adicional ni cuerdas fijas. Una vez coronado retornó al Campo Base Avanzado donde se encuentra descansando, tal y como anunció el equipo de su proyecto Summits of my Life.
Jornet sufrió en su primer intento un virus estomacal cuando se encontraba a 7.700 metros, y eso provocó que tardara más de lo previsto, o más de lo que él consideraba que podía hacer. De nuevo Jornet contra los límites del ser humano. Hace una semana, el catalán invirtió en total 26 horas en subir el Everest y 12 en descender hasta el campo base avanzado. Pero se quedó con la sensación de que podía bajar el tiempo al cronómetro. «Entonces avanzaba muy lentamente. Cada pocos metros tenía que detenerme ya fuera con vómitos o con rampas. De vuelta, pensé que me gustaría volver a intentarlo encontrándome en buenas condiciones». Ahora, Jornet ha necesitado 17 horas hasta la cumbre, saliendo desde un punto mucho más alto, y evitándose unos 30 kilómetros de una zona muy incómoda de piedra y hielo, entre el monasterio y el campo base avanzado. Y otras 11 horas y media para descender hasta el punto de partida para un total de 28h 30m.
Jornet sabía que podía batirse a sí mismo, y lo ha conseguido, al menos en ese tramo del campo base avanzado a la cumbre del Everest.
La aventura forma parte del proyecto Summits of my life, con el que Jornet ha establecido récords de velocidad en algunas de las cimas más emblemáticas del mundo, como el Mont Blanc y el Aconcagua. El Everest es el peak para un atleta excepcional. «Estoy muy emocionado de haber podido hacer cumbre otra vez. Hoy me he encontrado bien aunque hacía mucho viento y me ha costado bastante avanzar. Hacer dos veces cumbre en el Everest en una semana y sin oxígeno creo que establece una nueva línea de posibilidades en el alpinismo y estoy muy contento de haberlo podido llevar a cabo», ha comentado Kilian Jornet a su regreso.
Fuentes:
www.elpais.com
www.marca.com