Entrevista: Pirmin Bertle y la Primera Propuesta de 9a en Sudamérica
Hace un par de semanas nos enterábamos del encadenamiento, a manos del alemán Pirmin Bertle, de la primera propuesta de 9a de nuestro continente en el ya clásico Cañadón de las Buitreras (Piedra Parada, Argentina). Esta noticia casi pasó «piola» entre tanto encadene duro internacional, pero tiene una gran importancia local para el desarrollo de nuestro deporte, pues marca la aparición de la «novena dimensión sudaca»
Quizás antes habíamos escuchado poco o nada de Pirmin y sus encadenes; esto se debe a que, al igual que muchos escaladores fuertes, suele «pasar piola». Pero este escalador, que viajó durante 5 meses por la Patagonia, no saca esta propuesta de la nada: en sus manos se encuentra una buena lista de novenos que dan peso al grado planteado; así, deja la que, sin duda, será la ruta de referencia al hablar de 9s en nuestro continente. Quisimos hablar con él en relación a su viaje y la ruta encadenada.
¿Cuánto tiempo estuviste en la Patagonia?
Depende un poco de cómo uno defina a la Patagonia, pero empezamos la carretera austral el 1 de enero y nos fuimos a fines de mayo, así que… 5 meses completos.
Patagonia es conocida por sus cumbres y montañas, pero en el plano de la escalada deportiva no es tan popular, ¿cómo nace la idea de venir al “fin del mundo” a buscar dificultad?
Hace ya mucho tiempo que queríamos hacer un viaje largo, así que en septiembre nos fuimos a India y la idea era seguir en Sudamérica. Bueno, al principio pensamos hacer un viaje por Patagonia, pero también ir a ver el Altiplano en Bolivia y también a Perú. Nos gustó tanto la Patagonia, que nos quedamos más tiempo de lo que pensamos y de ahí ya tuvimos que volver.
¿ Qué fue lo que más te gustó de la escalada en Patagonia?
Hubo varios factores, pero creo que lo que más me llamó la atención es la comunidad y la gente. Los escaladores son súper amables, muy accesibles. Nos ayudaron con los dos chicos y compartíamos un montón de cosas. Esto es muy diferente allá en Europa, aunque quedan algunos sectores donde todavía hay un ambiente así; Siurana, por ejemplo. También hay que mencionar lo salvaje que es la naturaleza, la roca volcánica (aunque a veces no es de tan buena calidad) y la arenisca del Cerro Dorotea.
¿Cuáles fueron tus 3 sitios favoritos y por qué?
No visitamos muchos sitios distintos, porque nos gusta más conocer bien un lugar que estar cambiando siempre. Pero si hay que elegir 3, serían Piedra Parada (por la gente que estaba y por la roca, aunque no es siempre buena), Dorotea (por el Boulder que hice, que es una línea increíble con formas y colores locos) y El Chaltén, por el paisaje.
¿Cuál es tu impresión del potencial de estas lejanas tierras y que “falta” para que sea considerado por más escaladores de alto nivel.?
Claramente hay mucho potencial. El mayor problema es el acceso, hay pocas carreteras y cuando hay, muchas veces son malas. A nosotros nos convenía, porque estamos convencidos de que viajar es un proceso. Hay que tener tiempo y aprovechar de conocer, pero hay muchos escaladores de alto nivel que se sientan en el avión, van al hotel y 2 semanas después ya se van al otro lado del mundo… eso es complicado en Patagonia, aunque igual se puede, como se ve en El Chaltén. Igual hay que preguntarse si es algo bueno, para un deporte tan cerca de la naturaleza, el gastar tanta energía fósil para cambiar de continente solo por unos pocos días.
Por ejemplo, busqué rocas en Futaleufú y Palena, que son valles maravillosos, pero el acceso ahí es complicado por la vegetación y los pocos senderos; es un trabajo inmenso solo llegar a la pared.
¿Quedo algún proyecto pendiente?
Bueno quedó todo el norte para recorrer… Dejamos nuestro bus estacionado en Uruguay y quiero volver en un año a descubrir el Altiplano boliviano y peruano. Estoy tratando de motivar a amigos escaladores y fotógrafos para hacer un proyecto… Y claro, Punitaqui y Coquimbo todavía están en mi mente…
¿Que te llevó a tomar “Azul es el Cielo de los Ciegos” como proyecto?, ¿se veía algo especial en ella?
Con los niños, nos dimos cuenta rápidamente que no llegábamos a equipar, así que intente unos proyectos duros en el cañadón. Resulta que fue el único que me gustó, por los movimientos técnicos, el monodedo y las tomas chicas… Yo quería algo que no fuera demasiado largo, porque veníamos de El Chaltén y no había hecho ninguna ruta en los últimos meses..
¿Sabías o sabes algo de información de la ruta? (quién la equipo, si se había probado antes o no, etc.)
Nada más de lo que está escrito en la guía. Mike Fusillier y otros la equiparon. Después llegó Carlos y me contó que la habían intentado Dave Graham y Dani Andrada.
¿Cuánto tiempo e intentos invertiste en la ruta?
30 Intentos en 6 semanas.
¿Por qué 9 a y, quizás, haber sido más recatado en la propuesta con un 8c+/9a, siendo que es la primera vía que menciona la novena dimensión por esta zona?
Porque es mucho más difícil que los 9a que repetí antes (como A Muerte, Cabane au Canada, Jungle Speed). Ninguna me tomó más de 20 intentos. Además, es tan duro como mis cuatro 9a en mi primera ascensión. Y que soy de esa gente que opina que si es 9a, hay que darle ese grado. La idea es que los escaladores sudamericanos que quieran escalar este nivel lo puedan hacer y no dejarles un 8c+, que no es.
¿Qué significado tiene para ti plantear la primera propuesta de 9 a en Sudamérica?
Me alegro mucho de haber tenido la paciencia, ya que me enfermé y las condiciones meteorológicas se volvieron malas. Por sobre todo, me gustó que la gente se alegró mucho. Hubo mucha gente que me contactó espontáneamente. Aunque hay que relativizar un poco mi nivel personal, ya que es mi décimo 9a o más duro…También fue bueno que fue en la Piedra que es un lugar especial…
¿ Qué fue lo más difícil en el proceso para encadenar la vía?
La logística fue complicada. Mi hijo tuvo que super valiente: tiene 4 años e igual caminó muchas veces hasta el fondo del cañadón. Cuando empezó a hacer frío, también fue difícil, porque la humedad quedaba pegada en la pared. Y finalmente, porque me enfermé…
Durante este viaje conociste mucha gente, ¿compartiste con alguien que crees que podría llegar a encadenar esta vía?
No conocí a todos los escaladores fuertes de Sudamerica, así que no te puedo decir exactamente… Además, a mí no me molesta para nada escalar con gente que escala vías fáciles; así, muchos de mis nuevos amigos no son escaladores de alto nivel, pero sí con pasión. Quizás uno o dos jovencitos que, si profesionalizan su entrenamiento, podrán llegar a ese nivel algún día. Es un poco paradójico, lo que tanto nos gustó es que la gente es súper relajada y no se toma las cosas tan en serio, pero llega un momento en que si quieres superar tu nivel hay que entrenar en serio o, por lo menos, quererlo de verdad e invertir para eso… Espero que, si existe esa persona, lo intente y quizás pueda tener la suerte de viajar para repetir los 9a que hice en Suiza, donde sólo 2 han sido repetidos y confirmados por Adam Ondra.
¿Algún comentario, agradecimiento, saludo, queja o lo que quieras comunicar?
Estamos muy agradecidos por la gente que fue muy acogedora, que nos mostró una vida muy sencilla, lejos de mucho lujo y del estrés, pero con mucha pasión por lo que hacen y viven… Un saludo especial a todos los que compartieron su tiempo, comida, instrumentos musicales y muchas otras cosas con nosotros en el viaje.
Azul es el cielo de los ciegos – South America’s first 9a in Piedra Parada, Argentina. from Pirmin Bertle on Vimeo.
Por Chileclimbers.