“Perdidos en el Mundo” historia de un primer ascenso en Cerro Walwalun, Cochamó
Foto © Mirko Masè, Lorenzo Lanfranchi, Simone Pedeferri
En Febrero de este año, los intrépidos amigos italianos, Lorenzo Lanfranchi, Mirko Masè, Simone Pedeferri, Mattia Tisi y Andrea Zaffaroni realizaron el primer ascenso a una nueva ruta en la cara norte del Cerro Walwalun: “Perdidos en el Mundo” (870 m, 23 largos, 7b+, 6c+), proyecto que les tomó varias horas y días de escalada… sintiendo la angustia de ir trepando hacia lo desconocido. Toda una experiencia que como buena aventura, encontró momentos de tensión y momentos de gran alegría.
Foto © Mirko Masè, Lorenzo Lanfranchi, Simone Pedeferri
Si bien era la sexta vez que el italiano Mirko Masè viajaba a Sudamérica, primera vez que pisaba Chile. Se sentía emocionado, ya que para él Chile significaba un reflejo de lo desconocido y se sentía especialmente atraído por ese elemento de misterio que asociaba a su nuevo destino. Sin saber cómo nuestro país sería, su primera parada fue Puerto Montt, donde quedó muy sorprendido y a la vez asustado por la cantidad de lluvia que veía caer. Pero a pesar de la preocupación, el grupo continuó su camino hasta instalarse en el camping del Valle de La Junta.
El objetivo para este año ya lo tenían definido: la cara norte del Cerro Walwalun, ubicada al final del valle del anfiteatro. Desde las carpas, pasaron un día completo observando la ruta con los catalejos. Si bien estaban fascinados con el proyecto, a la vez se sentían intimados por los más de 1000 metros de escalada por esta placa de granito, que no se veía para nada fácil.
Pero el ojo no siempre encuentra la línea más lógica para un ascenso… a veces lo que parece menos obvio y más difícil de predecir, puede ser la clave para el éxito… con este pensamiento, el grupo decidió dar inicio a la escalada. Así, armaron un segundo campamento en el anfiteatro, cerca de la vía, y comenzaron a realizar los primeros intentos.
Por ser cara Norte, la ruta recibía sol prácticamente durante todo el día, lo que dificultaba aún más la escalada, haciendo prácticamente imposible aquellas secciones de pura placa, con malos agarres y demasiado trabajo de pies. Las primeras veces tuvieron que bajarse hasta dar con el pegue definitivo. Dudas, intentos, algunos buenos, otros desastrosos, tensión, riesgo y miedo de tener que abandonar el proyecto y perder todo el trabajo eran sentimientos comunes con los que estos italianos tenían que lidiar. Pero sabían que la escalada sería posible… de modo que sin darse por vencidos, la conquista de un largo siguió al otro, sus mentes se fueron alimentando de esperanza y coraje, fueron colocando un seguro tras otro, se mantuvieron horas, días, en la pared… hasta que alcanzaron el punto medio de la vía…. El centro de Walwalun… una inmensa pared, llena de techos, diedros, grietas y placas del terror que además cambian la dificultad dependiendo la hora del sol.
Los italianos escalaron 134 largos y 500 metros y hasta llegar al punto medio. Y desde ahí, todo parecería volverse aún más difícil…. Equipo, comida y agua empezaron a escasear. El equipo empezó a pensar seriamente la posibilidad de desertar… hasta que finalmente algo mágico les sucedería… llegarían a una maravillosa terraza, segura y confortable… tan cómoda que hasta les permitió caminar sin tener que estar amarrados e hidratarse todo lo que quisieron gracias a una fuente de agua fresca! Allí se quedaron dos noches, enamorados de un paisaje maravilloso entre montañas y estrellas.
Foto © Mirko Masè, Lorenzo Lanfranchi, Simone Pedeferri
Gracias a esta fuente de agua, el grupo decidió proseguir ruta arriba desde la gran terraza. En esta última sección, la roca cambió de calidad, ahora más podrida y vieja, con más grietas y salientes que les permitieron una escalada más agradable y lógica. El último tramo consistió en una fantástica chimenea vertical. Finalmente completaron los 23 largos y llegaron a la cumbre del Walwalun… maravillados por uno de los paisajes más lindos que habían visto, sintiéndose exploradores de lo más desconocido, asilados en los últimos confines de la tierra, más solos y aventureros que nunca.
A esta ruta la llamaron “Perdidos en el Mundo”, en honor a la sensación que sintieron todos esos días de escalada.
Fotos © Mirko Masè, Lorenzo Lanfranchi, Simone Pedeferri
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Por Chileclimbers en base a relato de Mirko Masè para Planet Mountain.
Fuente: New rock climb on Cerro Walwalun, Cochamó Valley, Chile. Planetmontain.com