Papeo de la semana: ¿Cómo y cuándo cortar la cuerda de escalada?

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como y cuando cortar la cuerda

Las cuerdas son pieza fundamental en el sistema de seguridad en la escalada por lo que siempre debemos estar atentos al desgaste que van mostrando, sobre todo en sus extremos, ya que esa zona se ve expuesta constantemente a la abrasión que generan los mosquetones al dinamizar una caída o a la tensión generada en el nudo del escalador. Si eres motivado con la escalada, inevitablemente llegará el momento en que tengas que cortar tu cuerda.

Los extremos de la cuerda son las parte que más rápido se desgasta tras el uso, generalmente esa zona se pone más ancha, más peluda y más blanda, y luego de un tiempo se ve realmente muy diferente respecto al resto de la cuerda. Depués de mucho trajín, el núcleo o alma de la cuerda pierde la cohesión con la funda en lo que se conoce como «deslizamiento de la funda», lo que le resta considerablemente su capacidad de absorber energía y de elongación.

Para seguir escalando y aprovechar la cuerda el mayor tiempo posible, ya que la inversión de la compra no es menor, hay que cortar la parte mala, la que normalmente se calcula a 5 metros de la punta.

Un buen consejo para evitar un poco el desgaste de la cuerda es cambiar el extremo del escalador entre pegue y pegue, ya que de esa manera le das descanso al extremo que ha sido sometido a vuelos y a tensión. La cuerda recuperará su elasticidad y no se verá «sobrecargada».

El correcto proceso para cortar una cuerda es muy simple, pero hay dos cosas que debes tener presente después de aplicar el cuchillo. Primero, que tendrás una cuerda más corta, por lo que hay que tener mucha atención con el largo de la ruta y siempre amarrar la otra punta a una mochila o hacerle un nudo. De esa manera te aseguras de que, si calculaste mal el largo de la ruta (la que no debe ser más de la mitad de lo que mide tu cuerda), en vez de caer el tramo de diferencia en caída libre, quedarás «trancado» gracias al nudo, evitando un accidente. Entérate más en nuestro artículo anterior: ¡Ojo con la longitud de la cuerda!

Si estás por comprar una cuerda y tienes la posibilidad de adquirir una de 70 metros, dale. La mayoría de las rutas equipadas en nuestro país se pueden escalar con una cuerda de 60 metros, pero como señalamos anteriormente, ante el uso es normal que tengas que cortarla para seguir usándola.

La segunda consideración que debes tener después de cortar la cuerda es que la marca que indica la mitad ya no servirá como referencia una vez que hayas cortado la cuerda, especialmente si haz cortado un lado más que el otro.

El primer paso para poder cortar una cuerda es sentarse y revisar muy bien cada extremo, buscando zonas que estén deterioradas (blanda o planas). Una vez encontrada la zona que está mala debes marcar la parte donde conviene cortar, poniéndole cinta para dedos (6 cm de ancho), bien apretada. Luego hay que tensar esa parte con los pies, y con un cuchillo con mucho filo, debes cortar la cuerda por la mitad de la cinta para dedos. Después, se debe quemar la nueva punta de la cuerda con un encendedor,  para que las hebras del  alma queden pegada entre si y no se separen de la funda.

Cuándo dar de baja la cuerda

Según los fabricantes, la vida útil de una cuerda es de cinco años desde la fecha de su fabricación, la uses mucho o poco y nada. En la práctica una cuerda puede durar desde un par de salidas hasta cinco años y eso es relativo al uso y al tipo de cuerda. A grandes rasgos podemos señalar que las cuerdas de mayor diámetro duran más ya que la funda es más gruesa. También los tratamientos «dry» le otorgan un poco más de resistencia a la abrasión. Sea cual sea la cuerda que tienes, cuídala de la exposición prolongada al sol, del polvo y la húmedad. Los filos y cantos suelen ser los peores enemigos de una cuerda, incluso más que el pipí (evita mojar tu cuerda con líquidos que no sean agua!).

Recuerda que las cuerdas tienen una vida útil reducida por lo que debes revisarla muy seguido, siempre debes estar atento  si alguna zona se pone blanda o plana o a cualquier otra anormalidad. Si no estás seguro de la resistencia de tu cuerda, hay que darla de baja, recuerda que tu vida depende de ella.

Si quieres más información sobre cuándo dejar de utilizar tu cuerda, revisa nuestro artículo anterior: ¿Cuándo debo dejar de usar mi cuerda de escalada?

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Por Chileclimbers

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