Cómo manejar el stress por Jerry Moffatt

Antes del consejo, les contaremos un poco de jerry Moffatt, una leyenda de la escalada mundial: nacido en el 1963 en Leicestershire, Inglaterra, es uno de los escaladores más exitosos entre la década de los años 80 y 90. Cuenta con importantes primeros ascensos y estableció nuevos niveles de dificultad en el Boulder. De sus ascensos podemos destacar: «Stone love», 8b+, Frankenjura, Alemania; «Liquid ambar» 8c+ en Lower Pen Trwyn, Wales y «The Ace», FB 8b en Stanage, Inglaterra.

Este artículo se basa en un consejo escrito por el mismo Jerry, que trata sobre el manejo del stress.

Si realmente quieres encadenar tu proyecto o te encuentras bajo una situación de alto rendimiento, seguramente vas a sentir mucha presión encima. Si miramos a la mayoría de los escaladores profesionales que ganan competencias y encadenan sus proyectos, muchas veces quedamos atónitos por las hazañas realizadas por estos atletas bajo mucha presión y nos preguntamos, ¿cómo fue que lo hizo? Realmente nos parece extraordinario el poder mental de algunos atletas para resolver problemas que estaban al máximo de su alcance técnico y físico, además tenemos que decir que la mayoría de estos atletas funcionan con un nivel de presión muy demandantes y es por eso que  nos sorprende tanto. ¿Cómo pueden escalar de esa forma? y controlar a tal nivel su mente, que para cumplir su objetivo, por muy difícil que sea, se vuelve muy alcanzable para ellos.

Los nervios son algo que nos puede ayudar a cumplir nuestros objetivos. Todos los deportistas que han logrado objetivos importantes dentro de sus carreras, se han sentido nerviosos en sus actos de competición o rendimiento, lo cual nos indica que hay una manera de usar esta herramienta a nuestro favor. Por ejemplo, en la zona de aislación en etapas de semifinales del campeonato del mundo, todos los escaladores están nerviosos, la diferencia radica en la capacidad y entrenamiento de algunos atletas  para poder prescindir de los márgenes de error y utilizar la energía canalizada de los nervios y la presión,  para elevar los niveles de adrenalina en la sangre y poder responder efectivamente ante la demanda de tal situación de stress.

Todo está en mantener y seguir una planificación y  una estructura de pensamientos positivos que nos permitan captar esta energía que proviene de los nervios y enfocarla hacia una actitud de reto frente a al problema que tenemos en frente. Es fácil llegar a pensar que los nervios son los culpables cuando tenemos un mal rendimiento en una competencia importante y sentimos que no hicimos nada de lo que acostumbramos a hacer. Ahí es cuando debemos analizar esta situación, ya que los nervios no necesariamente fueron los culpables del bajo rendimiento obtenido en la competencia, la verdad que el problema está por encima de eso, más bien radica en la secuencia de pensamientos erróneos o negativos que tenemos durante el transcurso de la competición. Por ejemplo, cuando nos vemos ante el tercer problema de Boulder en un campeonato muy importante para nosotros, y sabemos que nadie encadenó el Boulder, podemos optar por enfocar nuestra atención en una cadena de pensamientos que provienen de la información mental que obtuvimos “nadie encadenó el Boulder” y por ende sentir que es muy difícil para nosotros, generando una baja en la energía interna y en la motivación, o por otra parte podemos enfocarnos en que nos sentimos bien, en que sabemos que tenemos el nivel y que realmente le daremos un intento en que sea posible llegar al top, visualizando y preparándose para afrontar cada paso hasta el final.

Recientemente, Sidney Trinidad sorprendió al mundo con un encadene totalmente fuera de lo común

Comúnmente cometemos el error de enfocar nuestra atención en la parte del Boulder que más nos inquieta o que vemos más difícil de superar, pero luego una vez que la superamos, nos damos cuenta que antes de subir al Boulder, no nos habíamos preparado mentalmente para llegar al top, solo estuvimos pensando en ese Crux que tanto nos podría costar, y por consecuencia podríamos terminar cayendo en la parte fácil pero delicada del Boulder, arruinando un intento de cumplir el objetivo por falta de enfoque y practica mental de la visualización de todos los movimientos.

Debes estar preparado para cada movimiento del Boulder, generando la actitud adecuada y visualizando cada paso. Una vez escalando el Boulder nunca debes pensar que ya lo tienes, sólo debes mantenerte concentrado en la acción, prestando atención a cada movimiento que realizas.

Cuando visualizamos un Boulder con mucha atención, terminamos descendiendo nuestros niveles de ansiedad, ya que esta técnica nos permite decirle al cerebro como lo haremos y hacerlo sentir como si lo estuviéramos haciendo, terminando por creer que llegaremos arriba. Esto es muy importante ya que en una competencia podrás querer sentir que los nervios juegan a tu favor, pero la ansiedad podría terminar destruyendo cualquier intento por cumplir tus objetivos.

Una vez que visualizaste tu problema y crees que puedes realizarlo, debes mantener el foco en el momento presente, Si te hechas magnesio, siéntelo dentro de tus dedos y presta atención a eso. Si cepillas una presa, préstale atención a los detalles de cómo estas cepillando, esto te mantendrá en el presente. Al comenzar el Boulder es importante de no estropear el primer intento  con un resbalón de pies o una mala partida. Si partes mal el primer Boulder de la competencia, será difícil volver a la concentración anterior y no sentirte extraño. Es importante tener un buen comienzo y para eso debes mantenerte en cada movimiento que realices; no pienses en el final de Boulder, ni en el comienzo, ni que debes bloquear fuerte en el Crux; cuando llegue el Crux bloquearas fuerte si estas enfocado en el presente, ya que tu atención estará dirigida a lo que debes hacer en el momento que lo debes hacer.

Recuerda que tu actitud y dirección de los pensamientos pueden provocar grandes cosas, solo debemos saber a qué prestar nuestra  atención en los momentos de rendimiento.

Artículo realizado por Chileclimbers en base al Libro de Jerry Moffat