La motivación como motor de la progresión en la escalada

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motivación en la escalada

“La motivación mueve al mundo” es un cliché muy conocido… Según Wikipedia, la palabra «motivación» deriva del latín «motivus» o «motus«, que significa «causa del movimiento». Puede definirse como el señalamiento o énfasis que se descubre en una persona hacia un determinado medio de satisfacer una necesidad, creando o aumentando con ello el impulso necesario para que ponga en obra ese medio o esa acción, o bien para que deje de hacerlo. Otros autores definen «motivación» como «la raíz dinámica del comportamiento, es decir, los factores o determinantes internos que incitan a una acción». La motivación, en definitiva, es un estado interno. 

Hace poco apareció una nota de un niño de 14 años (Iker Ortiz), que encadenó un 8C/5.14b, llevando sólo un año y medio de escalada en el cuerpo. Esto es una progresión fuera de serie, si pensamos en el poco tiempo que lleva realizando el deporte. Según una entrevista, gran parte de esto fue por la motivación que le produce escalar, ya que a la fecha no entrena de forma planificada, es decir, sólo porque le gusta.

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Iker Ortiz en ‘Pa mi morena’ 8a+ de Pinet Foto: José Ortiz

Los niños en general tienen una gran capacidad de mejorar en el tema deportivo. Por ejemplo, la máquina norteamericana Ashima Shiarishi se demoró tres años en encadenar un v10, teniendo sólo 8 años, y desde entones siguió progresando muy rápidamente, llegando a encadenar hasta 5.14c (el primero fue a los 11 años en 2012). En un caso como este, seguro la palabra «motivación» también está detrás de estos logros. Pues es la cualidad la que les permite a niños superar el dolor, el miedo, la presión y el stress que puede provocar una vía o un Boulder de alto grado.

En Chile hemos tenido algunos casos de niños prodigios, como fue el caso de Luiz Guzmán, más conocido como “Luchito Mario”. Un gran escalador que con 15 años logró hacerse la vía “Si los perros», 8c en Las Chilcas y que realmente parecía que no se esforzaba al escalar, como pudimos ver en el video que subimos hace alunas semanas  (http://chileclimbers.cl/2014/02/12/la-historia-de-la-ruta-mas-dura-de-chile-si-los-perros-ladran-es-porque-cabalgamos/). Probablemente si hubiera continuado escalando y entrenando, y se le hubieran dado las  posibilidades, contaríamos con un gran escalador ya que en la actualidad tiene solo 23 años.

Tomás Ravanal fue otra revelación en su tiempo. Ya que empezó a escalar a mediados del 2005, con 20 años, y el 2007 encadenó su primer 8b+ con «Contacto» y el 2009 logró su primer 8c. Su caso es bastante meritorio, considerando la edad en la que partió escalando, pues ya siendo adulto, no se tiene la plasticidad, ni la ventaja de aquellos escaladores que partieron en el deporte a muy temprana edad, pues el esqueleto se adapta y se acomoda, además de la capacidad de aprendizaje de los “niños”. Sin embargo a mantenido la motivación a fierro y esto le ha permitido después de ocho años empinarse sobre el 9a.

Otro “mutante” es  Facundo Langbehn quien el 2005, ya competía en la categoría expertos junto a Juanjo Fernández,  Keko Quiroga,  Diego Tapia y ¡con sólo 12 años! Daba ternura ver como este “rubio” pelucón no podía continuar la vía de la categoría expertos, ya que los pasos le quedaban largos y se quedaba largos minuto tratando de resolverlos con un “aguante” que finalmente hacían vislumbrar el “mono” que sería algún día… y que hoy a 19 años acaba de lograr su segundo V14.

¿Y que hay detrás de todo esto? ¡¡MUCHA MOTIVACIÓN!! obviamente acompañada de talento, entrenamiento,condición física, determinación, etc. Pero si se tiene todo eso, sin motivación, no se llega tan lejos.

La motivación ha sido estudiada desde distintas perspectivas científicas y filosfóficas, de hecho existen numerosas teorías en función a su origen y efecto en la conducta, así como su relación con la «necesidad». Su incidencia en la conducta, desde su activación, regulación y orientación, debiera estar ligada a distintas variables, tanto internas como externas al ser humano. En un próximo artículo quisiéramos ahondar más sobre este tema, sobretodo en función a la necesidad o motivo en que se basa la motivación. Pues los motivos pueden agruparse en categorías, racional/emocional, egocéntrico/altruista, atracción/rechazo. Al menos, intentaremos enfocarlo desde una perspectiva ligada a la escalada… y al «hacer» en  la vida.

¡Pero desde ya los instamos a motivarse por el trepe! Y que el disfrute de la escalada sea uno de los motores fundamentales. Ya que como decía Alex Lowe: “el mejor escalador es el que mas se divierte escalando”… muy sabias palabras.

Por Chileclimbers

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