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Facu Langbehn nos cuenta más de su experiencia en USA y proyectos para este año

Fecha de Publicación: 26 junio, 2013

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Hace un tiempo le hicimos una entrevista a Facu Langbehn para que nos contara sobre su año sabático en Estados Unidos y sus cosechas escalísticas, sobretodo en lo que respecta a boulder en la temporada invernal de California. Este cabro está hecho una verdadera máquina, sin duda, uno de los mejores de Sudamérica en esta modalidad. Por eso quisimos saber cómo prosiguió su viaje en gringolandia y qué se viene con este personaje que claramente tiene mucho potencial para sorprendernos más y más.

Facu Langbehn:

En enero me fui a vivir a Los Ángeles, California, por 5 meses. Como llegué en el invierno de allá, aproveché para escalar todo lo posible en Bishop, porque es de mis lugares favoritos del mundo para escalar, y sólo se puede en invierno.

En los primeros meses toda mi energía la enfoqué en tratar de encadenar boulders duros. Apenas podía, agarraba el auto, cruzaba el desierto y me internaba en las montañas. Ahí me salieron unos cuantos boulders súper buenos; unos clásicos súper duros, como Mandala V12, The Mystery V12, The Buttermilker V13 y Spectre V13. Algunos salieron bien rápido, pero otros me llevaron MUCHO tiempo y trabajo, como Spectre, que me hizo sufrir antes de dejarse encadenar.

Cuando Bishop se puso imposible me fui a otros lugares míticos del boulder. Spring Break en Red Rocks, fin de semana en Black Mountain, y así seguí dándole a fondo al bloque en roca.

Luego llegó el verano y la cosa se puso hot, así que empecé a pasar más rato en la casa y me puse a entrenar. Empecé con un personal trainer para trabajar la parte física y me pasé a la resina. No es tan entretenido y uno no disfruta tanto como escalando en roca, pero si de verdad quieres pasar al siguiente nivel, este es el camino más rápido. Al principio fue como… «mierda, me siento más pesado que nunca«, pero al tiempo los resultados empezaron a venir y me di cuenta lo que uno puede hacer.

Así que el último tiempo en USA fue harto entrenamiento con escapaditas a roca cada vez que podía. Pero, en el Vail (Colorado) se iba a realizar una de las fechas mundiales de boulder, así que como parte del entrenamiento y para pasarla bien me fui a competir. La experiencia estuvo muy buena, porque a pesar de que el resultado no fue bueno, me sentí muy bien en el nivel de la competencia y me di cuenta que sólo falta competir mucho y agarrarle la mano. Esto es lo que nos falta acá en Chile, competir, competir y competir; Es tener la experiencia de competencia, que al fin y al cabo es lo que más influye para tener un buen resultado. Escaladores como Lucas , Jesús y Tomás, tienen el nivel de más para estar metidos en semi-finales e incluso finales en copas del mundo, solo falta seguirle dando.

Entonces eso fue unas de las cosas que me entregó este viaje: la motivación para seguir a fondo y saber que si uno quiere, mierda que se puede, y que el único límite es el que uno se pone. También, el escalar con muchas personas distintas, de todas partes y todos los niveles, te entrega mucho como escalador.

Ahora estaré un tiempo en Chile y parto luego a Colombia a los World Games, de ahí al mundial juvenil en Canadá. Después me voy a Europa para hacer unas compes y escalar harto en roca. Mi mayor objetivo es el mundial juvenil de Vancouver, porque es donde más posibilidades tengo de obtener un buen resultado. Además, todas las compes, menos una, en las que participaré, son de ruta, pero en este momento mi motivación está un poco más enfocada en el bloque. Igual estoy ultra mega motivado con seguir escalando en lugares diferentes y compitiendo todo lo posible y a darlo todo.

Bueno, para terminar, este viaje ha sido de las mejores experiencias que he tenido en mi vida, y la escalada, aunque pensé que no podía, cada vez me gusta más y me llena más. Estoy motivadísimo para intentar de llegar lo más lejos posible y de disfrutar cada segundo del proceso. Me gustaría traspasar la motivación a todos los que escalan, para que le sigan dando, que no hay nada más rico y sobretodo a los que pretenden jugársela en serio, que le den porque de verdad se puede.