Entrevista a Helmut Kocking “El Koko”, un pionero de la Deportiva en Sudamérica.

Se le ve pasearse por los pasillos del “gimnasio” El Muro, observando los frutos de haber hecho realidad uno de sus sueños; un Centro de Escalada para facilitar el entrenamiento, acercamiento y aprendizaje del deporte en las personas. Helmut Kocking “El koko”, es uno de los que ha visto y vivido la evolución de este deporte (deporte que con sólo ver a otra persona practicarlo ya produce sudor y picazón en las manos), habiendo formado parte de la elite escaladora chilena durante muchos años y un verdadero pionero en varios aspectos de esta actividad. Su participación ha sido clave junto a EL MURO en el crecimiento y apoyo de nuevas generaciones de escaladores de Chile y el crecimiento de la escalada.

Para saber como ve y que opina de esta evolución le hacemos esta pequeña “interviú”.

1.- ¿Cuántos años ligados a la escalada?

Pufff… escalé por primera vez el ‘87 y me embalé entrenando cuando me compré mi primera cuerda, el ’89. ¿O sea? van a ser ya 25 años…

2.- ¿Cómo te iniciaste en este deporte y qué fue lo que te atrajo?

Un amigo y compañero de la U., el Pato Cerda, gran montañista y escalador de esa época, me invitó a Las Palestras a probar su deporte. Yo hasta entonces era voleibolista en retiro y aluciné al tiro. Era el deporte perfecto, fusionaba dos de mis pasiones, el deporte de alto rendimiento (la técnica, el esfuerzo físico, el entrenamiento, etc.) y por otro lado, la vida en la naturaleza y no sé… me embalé…

3.- ¿En todo ese tiempo cuáles han sido las tres cosas (que tengan que ver con escalada) que más te han sorprendido?

Bueno, creo que…
-Los accidentes, las muertes de amigos y conocidos que te remueven el piso de vez en cuando…
-La felicidad que sentí cuando la Sara (Alwin) se metió 28° en la Copa del Mundo en Birmingham el ‘99, entre 68 escaladoras.
-Cuando, después de ser campeones absolutos de Sudamérica me quitan horas de la selección, ¡plop!…

4.- Cuéntanos un poco como era la escalada “Old School”. ¿Dónde y cómo entrenaban, cómo era el ambiente, la onda? ¿Alguna anécdota?

Cuando yo comencé en la escalada, eran muy pocos los que entrenaban, practicaban la deportiva, si es que se le pudiera llamar así en esa época, sólo para prepararse para escalar paredes.

Yo con otros amigos del Físico entrenábamos mirando los videos de Patrick Edlinger, trotábamos, hacíamos tracciones en el marco de la puerta, escalaba en las paredes de ladrillos regleteando en las rendijas, (no existían los muros artificiales)  y lo mejor era ir a la piscina Antilén en el cerro San Cristóbal y hacerse la pared de piedra completa en travesía, ida y vuelta…

Las competencias eran en roca, no había muros. El ‘90 participamos en el primer campeonato panaméricano de escalada, que organizó la Escuela de Montaña del Ejército de Río Blanco, con la Feach y ayuda del DAV. Las clasificatorias eran en roca y la final se hizo en el primer muro artificial que construyó en Chile, si no me equivoco. Era de tablones atravesados, increíble, comenzaba horizontal unos tres metros, después vertical o levemente desplomado, luego un techo de un metro -o algo así- y una salida totalmente acostada, como de 30°, increíble… no se lo imaginan, por ahí tengo alguna foto. ¡La final era un 11b! y solo la encadenó un colombiano.

5.- ¿Qué es lo que más diferencia a la escalada actual con la de tus inicios y a que se debe este cambio?

En primer lugar hoy existe la Escalada Deportiva; antes solo existía la Tradicional y el Montañismo. Hoy nadie cuestiona si el deporte va pa´ las olimpiadas (ese era mi sueño… el ‘92 se insinuó que iba de invitado a las de Barcelona… creo que hasta tengo el recorte).

Bueno… la cantidad de rutas, zonas, muros artificiales, presas, escaladores y todo esto redunda en el gran nivel que se ha alcanzado… cuando yo comencé no existían Las Chilcas, sólo las Palestras.

En esa época estaba recién comenzando la escalada deportiva, pero yo diría que se inició el ‘89 con el Campeonato de Rengo, pero entre ese año y el ‘93 todo era muy básico.

Después del ’93, que vinieron unos entrenadores franceses a dar cursos de entrenadores, abridores de rutas, jueces y organizadores de competencia, la cosa pegó un vuelco. ¡¡¡Aprendimos a usar el borde externo!!! jaja, a cruzar las manos, a leer, a anticipar, explotar los puntos de menor esfuerzo y los puntos de descanso, el ritmo… etc.

6.-En los ‘90 a nivel de competición, Chile lideraba el podium panaméricano, ¿qué tiene que cambiar o mejorar para que estemos de nuevo entre los mejores?

Mmmmm, no sé, te puedo decir que en esa época teníamos el apoyo de la FEACH con recursos para entrenar, ir a las competencias… entrenábamos tres, cuatro o cinco veces por semana, íbamos a cuanta competencia hubiera… Y con recursos propios si era necesario, municipales o de la FEACH. Escalábamos en roca, teníamos un grupo con mentalidad deportiva y competitiva. Y tenían un entrenador igual de motivado…

Fuimos campeones el ‘94 en Guatemala, 2° en México ‘96, 1° en Venezuela ‘98 y 1° en Chile el 2000. Además de Sara Aylwin y Juan Jose Fernández que se subieron al podium en varias otras competencias sudaméricanas, así mismo, Diego Tapia, Sebastián Vera, Rodrigo Vera, María Paz Tapia, Esteban Vigoroux… «Gran grupo», además eran muy fuertes en roca y equiparon y encadenaron muchas rutas de alto nivel.

7. Sin duda hoy por hoy hay mucha más gente que escala doces y treces, pero ¿por qué no hay tanta gente más que escale catorces y este grado sigue reservado para un par de escaladores?

Bueno, yo creo que se debe a varios factores, pero sin duda que uno de ellos es que para entrar a ese nivel superior o hay que tener o, mucho talento -y esos son pocos- o dedicarse a entrenar, escalar todas las semanas, enfocarse, etc… Vivir para escalar, no queda otra… Tienes que escalar o entrenar unas cuatro o cinco veces por semana y hay que mantener la motivación en el tiempo. La constancia, finalmente es la cualidad más importante, la perseverancia; pero no de semanas, de meses, de años…. Es un tema de cantidad de escalada y de buena escalada.

8. En el muro comenzaron a escalar y hoy entrenan Inti y Borja, quizás dos de los jóvenes con mas proyección y talento, ¿es esta la primera “cámada” de escaladores de El Muro? y ¿cómo los ves en el futuro?

Puede ser la primera cámada… Estos chicos tienen mucho talento, mucha motivación y una familia que los apoya. Respecto al futuro, no sé…creo que necesitan una estructura deportiva de alto nivel adecuada que canalice, contenga y desarrolle ese motor que traen y que han formado sus respectivos profesores. Pero falta una estructura deportiva de alto nivel, si no van a quedar ahí no más… Estoy seguro que si nuestro trabajo no se hubiera cortado el 2000, por razones que no vale la pena recordar ni destacar, hoy tendríamos escaladores entre los veinte del mundo y mejor quizás, en esa época veníamos como avión…

9. ¿Cómo imaginas la escalada nacional y EL MURO de aquí a cinco años mas en relación a como se ha desarrollado el deporte hasta ahora?

La Escalada Nacional: creo que las cosas han avanzado mucho, finalmente había que darle tiempo al tiempo, quizás nosotros y el grupo que nombré estuvimos adelantados a la época…

Respecto a El Muro, bueno, hay que evolucionar, que estar constantemente mejorando, renovándose y buscando nuevos horizontes. Ahí estamos, consolidando algunos aspectos para buscar nuevos retos…

10. ¿Palabras el cierre, datos y o saludos?

Es bueno que las nuevas generaciones de escaladores conozcan un poquito de cómo comenzó todo esto… No han pasado taaantos años tampoco, ¿no?, ¿o sí?… Muchos de los grandes forjadores de la escalada deportiva aún están activos y aún son fuertes, qué se yo… el Claudio Retamal, Sara Aylwin, el Diego Tapia, Juanjo, El Keko, El Yoyo Vera, Erick Vigouroux, Carlanga… se me puede ir alguien… pero la memoria…mmm… ya me está fallando…

Por Tomás Contreras

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